Tras meses de presión mediática, la compañía de comercio y tecnología dirigida por Jeff Bezos ha decidido aumentar el salario de sus trabajadores en Estados Unidos a al menos 15 dólares la hora.
La medida beneficiará a 250.000 empleados que tienen contratos permanentes y a 100.000 trabajadores temporales que son contratados en la época de mayor demanda.
La empresa había sido fuertemente criticada por sus políticas laborales que incluían subcontratación, bajos salarios y malas condiciones de trabajo. A mediados del presente año, una porción importante de su fuerza laboral había entrado en paro debido a que la constante valorización de la empresa (que llegó a un trillón de dólares) y las exenciones tributarias (la empresa no pago impuesto de renta en 2017) ya convertían a Jeff Bezos en el hombre más rico del mundo, pero no mejoraban las condiciones de los trabajadores.
El senador demócrata Bernie Sanders presentó una propuesta de ley a inicios de septiembre la Stop BEZOS Act que pretende aumentar los impuestos de las empresas que pagan salarios muy bajos a sus empleados (como Wal-mart y Amazon) y que obligan al gobierno a invertir grandes sumas de dinero en beneficios de seguridad social para estos empleados de baja remuneración. Muchos han sugerido que esta es la razón principal por la que Bezos decidió aumentar los salarios.
Amazon hizo el anuncio oficial en un comunicado de prensa donde manifestó que “hemos escuchado las críticas (…) estamos contentos con este cambio, y animamos a nuestros competidores y a los otros proveedores de empleo a unirse”. Además, la compañía se comprometió a hacer lobby en el congreso para que se aumente el salario mínimo en todo el país, que actualmente es de 7.25 dólares/hora.
Los trabajadores de empresas que hacen parte de la red de Amazon, como Whole Foods, también se verán beneficiados por la medida. Amazon emplea actualmente casi 600.000 en todo el mundo.